Metabolismo Energético
Existen diferentes formas de encontrar energía, algunos de los tipos de energía son nuclear, química, eléctrica, mecánica, eólica. Aquellos procesos donde se libera energía se denomina: Procesos egergónicos, son procesos de reacciones químicas donde se libera energía para producir movimiento. Proceso endergónico, son aquellos donde se atrapa la energía.
El metabolismo energético es el conjunto de reacciones químicas que ocurren en el organismo, capaz de almacenar o liberar energía, este consiste en dos formas:
-Anabólica: crecimiento. Es la síntesis de sustancias químicas orgánicas simples o sencillas en complejas para la almacenar energía.
-Catabólicas: se consume energía para regular el metabolismo y la temperatura corporal. Consiste en la descomposición de sustancias químicas orgánicas en sustancias orgánicas más simples
El consumo de energía es el trabajo externo más la energía almacenada más el calor que se produce (porque muchas reacciones son exotérmicas).
La tasa metabólica es la cantidad de energía liberada por unidad de tiempo.
La tasa metabólica basal es cuando el trabajo externo es cero, la energía almacenada también es 0 (en ayuno), es la cantidad de calor desprendido.
La problemática de la tasa metabólica basal es compleja, por eso, si el calor que se desprende es fruto de reacciones oxidativas, se determina el consumo de O2.
El metabolismo estándar es que en los animales, la tasa metabólica basal es muy difícil de determinar porque se mueven sin parar. Es la misma que la tasa metabólica basal en humanos.
La eficiencia es:
-La contracción isotónica es el 50% de la energía que va al músculo y se destina a la contracción y el resto se desprende en calor.
-La contracción isométrica no consume energía.
Lo que se oxida para obtener energía y calor son los hidratos de carbono, lípidos y proteínas. El cociente respiratorio es: en los glúcidos, Ej: glucosa:
C6H12O6 + 6 O2 = 6 CO2 + 6 H2O
La Bioquímica, es una ciencia particular que sustentada en otras como la Química, la Física y la Biología, tiene por objeto el estudio de la composición química de los organismos vivos, los fenómenos y procesos químicos-biológicos que en estos se verifican, los que garantizan la existencia, la regulación y desarrollo.
Así, dentro de su objeto aparece también todo lo relacionado al organismo humano: las estructuras, las propiedades y las funciones biológicas de las sustancias que lo forman, lo que se expresa en cientos de reacciones químicas que además de producir numerosas sustancias necesarias, traen dispuestas una transformación y obtención de la energía para la realización de múltiples actividades vitales.
Evidentemente, todo esto tiene un gran valor teórico-práctico en el contexto de la Educación Física y el Deporte. De ahí la existencia y desarrollo de la llamada Bioquímica del Ejercicio Físico o Deportiva, la que fundada por A. Hill, E. Simonson, entre otros, está muy correspondida en proteger y mejorar la salud de los individuos, así como en lograr mejores resultados, rendimiento y eficiencia de los practicantes y deportistas en general.
Una rama sobresaliente de la Bioquímica del ejercicio físico, es la Bioenergética: ciencia que se encarga de estudiar las transformaciones energéticas en los organismos humanos.
Por otra parte, es importeante considerar:
La Adaptación Cardiovascular al Ejercicio
Entre las modificaciones cardiovasculares se observa un descenso de la frecuencia cardiaca (pulsaciones del corazón por minuto) en reposo y también durante la realización de un ejercicio físico de intensidad submáxima, sin que se aprecien modificaciones habitualmente en la frecuencia cardiaca máxima con el entrenamiento. Es decir, un mismo esfuerzo mecánico (por ejemplo correr a 12 km/h) antes del entrenamiento podría suponer para el organismo un esfuerzo en cuanto a frecuencia cardiaca de 140 lat/min. y después de 4 semanas de entrenamiento aeróbico suponer 130 lat/min. Indudablemente es una evolución positiva y una mejora en la condición cardiovascular. La frecuencia cardiaca por lo tanto, es un parámetro fácil de medir, que cuantifica de una manera práctica y real la intensidad del esfuerzo físico a nivel cardiovascular. Su conocimiento nos permite valorar la intensidad de un ejercicio y prescribir las cargas de entrenamiento en función de dicho parámetro. Igualmente vamos a poder realizar una transferencia del esfuerzo realizado en las ergometrías (pruebas de esfuerzo realizadas en los laboratorios de fisiología del ejercicio) al terreno deportivo. Por este motivo, cada vez con más frecuencia, los deportistas en sus entrenamientos y competiciones, fundamentalmente atletas de fondo, utilizan pulsómetros que, por telemetría, les permiten saber en cada momento la frecuencia cardiaca.
Otra de las modificaciones es: la tensión arterial, la cual disminuye en reposo y durante el ejercicio experimentan incrementos más suaves que en sujetos no entrenados, de forma que el producto de la tensión arterial sistólica por la frecuencia cardíaca, que es un índice de sobrecarga a que está sometido el corazón, disminuye.
Las adaptaciones más interesantes que se producen a nivel cardiovascular como consecuencia del entrenamiento aeróbico, dinámico, de larga duración, es en relación al tamaño de las cavidades del corazón, las cuales aumentan, mejorando su capacidad de llenado lo que hace que se incremente el volumen cardíaco. Y la última adaptación importante del corazón es el incremento del volumen sistólico o volumen latido, es decir, la cantidad de sangre que expulsa el corazón cada vez que se contrae. Este aumento se produce en reposo y en ejercicio submáximo y máximo.
Para finalizar, es fundamental observar el ciclo del ácido cítrico donde se dan un conjunto de reacciones energéticas: